Se ha creído el relato y las ofertas del Bauzá de la embajada, y ha destruido su propia construcción al punto de que el gobierno de Córdoba esta muy cerca de cambiar de manos.
Schiaretti hace fuerza pero sabe que su destino en la actuales condiciones, es de derrota. No podrá enfrentar con éxito el acuerdo Macri, Aguad, Juez, y a pesar de que piensa de la misma manera que ellos, no puede encabezar la alianza conservadora cordobesa, porque en el fondo la estrategia de los monopolios, ademas de conservadora, es gorila. Quieren destruir a todo lo que huela o haya olido a peronismo. Sacarlo de la cultura nacional. Lo mismo harán con Massa , lo utilizarán para intentar quitarle fuerza al PJ bonaerense y trataran de dar la pelota a Macri.
Al final de esta película y al paso que vienen las cosas De la Sota quedará fuera de juego.
No hay acuerdo con Massa porque en realidad Massa no tiene nada para ofrecer a De la Sota en Córdoba que es donde se juega el bien mas preciado de De la Sota, que es la pocesión de Gobierno de la Provincia. El sabe que sin eso deja de existir automáticamente. Es mentira que quiere ser Vice o cosa parecida. Los vice no existen. Eso lo sabe perfectamente.
Parece que ahora anda atras de Scioli El asunto es averiguar que puede obtener de Scioli, o del Kirchnerismo.
En primer lugar ya ha olfateado que el Kirchnerismo gana.
Le dió miedo lo de IBOPE en Brasil. Se avivó que Magnetto le miente y que si bien lo precisa para posicionarse como presidenciable ( lo que es su única herramienta de negociación) , hay que andar con pies de plomo.
Y lo mas probable es que busque un acuerdo que le permita quedarse con el gobierno de Cba., y por como es él, entregando lo menos posible, ya sea entregando cosas que en realidad no le sirven, o poniendo en las listas gente nuestra que en realidad es de él.
Veremos. Quedan unos meses. En Junio se inscriben la alianzas es decir que en Marzo nos daremos cuenta-
Los massistas sospechan de un eventual acuerdo del gobernador con Daniel Scioli.
El exintendente de Tigre habría limado asperezas con Luis Juez, aunque no hablaron
de convenio electoral. Llaryora y Passerini se muestran juntos.
Por Julián Cañas
Pasaron dos semanas desde que José Manuel de la Sota lanzó su precandidatura presidencial. La definición del gobernador generó fuertes remezones dentro del PJ cordobés y también en el escenario nacional.
En Córdoba, los gestos de De la Sota a favor de Juan Schiaretti produjeron malestar en los sectores más jóvenes. Los ministros Martín Llaryora (Industria y Comercio) y Daniel Passerini (Desarrollo Social) fueron los que más recibieron el impacto, ya que están lanzados como aspirantes a suceder al gobernador, enarbolando la bandera de la “renovación” del peronismo local.
A nivel nacional, la novedad es el enfriamiento de la relación entre De la Sota y Sergio Massa. “Si ‘el Gallego’ (por De la Sota) confirma que será candidato por un espacio propio y no por el Frente Renovador, oficializará su acuerdo con Scioli para restarle votos a Sergio (Massa)”, argumentó un massista cordobés de diálogo directo con el exintendente de Tigre.
La grieta entre Massa y De la Sota es profunda e inocultable, cuando hasta 60 días atrás se mostraban como aliados para enfrentar al kirchnerismo.
¿Le conviene a Scioli una foto con DLS?
ResponderEliminar